Tareas para Arica

Hoy los chilenos elegiremos la primera autoridad que encabezará la administración del Estado por los próximos cuatro años,

Las tareas a realizar están contenidas en gran medida en los respectivos programas de gobierno. Las de nivel nacional han sido divulgadas ampliamente, no así las de nivel local, que inciden en nuestro éxito con tanta o más fuerza que las decisiones de alcance nacional.

Una zona fronteriza como Arica requiere de leyes y normas especiales. Su actividad económica está fuertemente relacionada con los países vecinos, por lo cual la frontera constituye una herramienta de desarrollo, y una potencialidad a condición de que esté bien administrada. Es una desventaja cuando no se tiene los instrumentos legales adecuados, o cuando nuestros vecinos tienen leyes más inteligentes que las nuestras. El desafío es entonces mejorar nuestra legislación con la velocidad que los tiempos modernos requieren.

La mejoría de las relaciones con Bolivia no será tarea fácil. El nuevo Presidente ha tenido un constante discurso anti-chileno, y pretende condicionar toda mejoría de relaciones al tema marítimo, lo cual al ser inaceptable para Chile, seguramente va a estancar todo progreso posible. Chile puede vivir sin Bolivia. La duda es si Arica puede crecer sin los vecinos. Como para los empresarios bolivianos es más atractivo entenderse con Chile, se deberá abrir canales no oficiales de relaciones para progresar en este ámbito. No olvidemos que la mayor parte de la economía boliviana es informal, y sus códigos se rigen más por la costumbre que por las leyes.

Cultivando tomates y aceitunas seguiremos marcando el paso; si no se reorienta y moderniza el sector agrícola con real decisión, voluntad y apoyo estatal, estaremos desperdiciando una gran potencialidad.

Lo mismo vale para el sector pesquero, al cual debe cambiarse el concepto de pesquero por el de "producción" de especies marinas, dando un fuerte impulso a la acuicultura, actividad que tiene una enorme potencialidad de desarrollo. Su fomento requiere tanto de apoyo como de desburocratización.

El turismo merece un capítulo aparte, pero en todo caso es una actividad que depende más de nosotros que de la autoridad central.