Sunday, January 28, 2007

¿El deber ante todo?

Un amigo me señaló que la actual tarjeta de crédito es la versión moderna de la ficha de la salitrera; para que entiendan los jóvenes, en las salitreras el sueldo se pagaba en fichas, con las cuales los trabajadores sólo podían comprar en la pulpería de la misma salitrera, por supuesto a los precios que la pulpería monopólicamente fijaba, sin opción de comprar en otro comercio.

Hoy, los sufridos Moya, en su gran mayoría, endeudados con muchas tarjetas de crédito, cobran el sueldo, y en su peregrinación por ellas pagan el mínimo y quedan sin efectivo, por lo que la única vía que les queda para seguir consumiendo es volviendo a usar este crédito, obviamente en las mismas casas comerciales, sin opción de comprar en otros lugares, aunque los precios sean más convenientes. Es la sofisticación moderna de la ficha salitrera.

Un chiste cuenta que un paisano mío en su paquetería, atiende a un huaso que quería un pantalón, y al preguntar el precio, le responden: diez mil pesos (o besos), pero lo requiere a plazos y se le ofrece 18 cuotas de mil pesos, ante lo cual el cliente reclama un mejor trato, por lo que se accede a 24 cuotas de mil pesos, lo que conformó totalmente al cliente.

Este chiste refleja muy bien la realidad, pues es bastante común que el comprador elija la opción que le signifique pagar la cuota más baja, sin considerar los meses que estará pagando.

Los chilenos debemos 17 días de sueldo en promedio, y se requiere un día de trabajo sólo para pagar los intereses, y ante la avalancha de ofertas, y el promedio de deuda en países desarrollados, es posible que estos promedios "mejoren"

Si usted paga el mínimo en su cuenta de tarjeta, aproximadamente un 4 % de su deuda total, y le aplican un interés de 2,5 % mensual, tardará 6 años en pagar el total de su deuda, siempre que no sea objeto de multas o intereses extras por atrasos, lo que aumentaría el plazo.

El endeudamiento históricamente en Chile fue " buen negocio", pues la tasa de interés era menor a la inflación, y por esto era muy difícil obtenerlos, pero hoy la situación es diametralmente opuesta, pero seguimos pensando que es un buen negocio endeudarse.

¿Podremos cambiar esta cultura? Obviamente que si, pero para lograrlo al menos en el colegio debería enseñarse economía y matemáticas financieras básicas, a objeto que se sepa diferenciar los "buenos negocios" de los otros, para que éstos no sólo sean "para los otros".

Thursday, January 18, 2007

Las fronteras pasan a ser un recuerdo del pasado

(Entrevista en diario La Estrella de Arica, 7 enero 2007)

Para Gabriel Abusleme la estructura administrativa que rige la economía local y su vinculación con Perú y Bolivia es anacrónica y totalmente opuesto al modelo global de apertura de fronteras e integración económica entre los países.

Para el presidente de la Cámara de Comercio de Arica continuar, por ejemplo, con controles aduaneros que ya no se justifican con el correr de los nuevos tiempos, no es otra cosa "tapar el sol con un dedo".

Sostiene que las sucesivas demandas del gremio productivo en distintas materias, han sido negadas por el Gobierno de turno, y luego, igualmente, implantadas con un desfase de "10 a 15 años" de la época original en el que surgió la petición. "Así avanzamos", sostiene con ironía el dirigente.

-Al asumir recientemente el mando de la Cámara de Comercio, usted ha planteado la necesidad de abrir la frontera entre Arica y Tacna, hay mucha gente que piensa que por ese camino, sólo se va a debilitar mucho más, la economía local...

-Estoy consciente de que hay gente que le tiene temor a esa propuesta y es una respuesta humana al cambio. La gente quiere el status quo. Hoy el mundo evoluciona, y las fronteras pasan a ser cada día más, un recuerdo del pasado.

Se ve en Estados Unidos, en Europa. Veo la experiencia de Zona Franca de Iquique, su gran diferencia con los intentos con Perú y Argentina.

La Zofri se instaló en los setenta, cuando se vislumbraba que venía una apertura económica. La Zotac se hizo a destiempo, no tuvo ninguna posibilidad de desarrollarse. El control de la avanzada Chacalluta debe ser solamente fitozoosanitaria y de aspectos de control de drogas, pero no tiene mucho sentido cuando se aplica para los autos.

Los automóviles en Arica y en Tacna tienen casi el mismo precio, no hay incentivos para llevarse autos de contrabando o ingresarlos. Claro, que debe haber control policial cuando los vehículos están "encargados", pero en lo aduanero, no.

Pero alguna utilidad tuvieron esos controles.

-Ese control aduanero para los vehículos nació cuando en Chile se importaban los autos con dólares preferenciales, baratos, los dólares eran escasos, y para que no se fueran convertidos en automóviles, existían esas prohibiciones. Mantenerlas ahora es anacrónico. La frontera debe estar abierta para productos y personas.

-Esa propuesta no es compartida por todos los sectores, sobre todo, algunos que reflejan un pensamiento más "proteccionista"

-Hay un proyecto bastante más ambicioso que el nuestro, Juan Villarzú, propuso, a través del artículo "América Latina no necesita más Chávez" de El Mercurio, crear una zona económica, casi un país aduanero entre la Primera Región de Chile, Bolivia y los departamentos de Tacna y Moquegua. Que transiten los productos libremente. Ese es mucho más ambicioso que el muestro, y si me preguntan, yo preferiría el proyecto de Villarzú.

En un escenario futurista de abrirse la frontera entre Chile y Perú, ¿Cómo se advertiría el impacto positivo?

-Se podrían integrar mucho mejor las economías de Perú y de Chile, y si fuera Bolivia, integración con la economía boliviana. Chile tiene ventajas sobre Perú y Bolivia en el sistema bancario, más seguro, barato y eficiente, ahí ya hay una gran ayuda para el comercio exterior.

-Pero aquí, hay ciudadanos bolivianos que se quejan de que no pueden hacer negocios, porque no pueden abrir cuentas corrientes...

-Colocamos pequeños obstáculos, aquí con el rut pueden abrir una, en Estados Unidos se abre una cuenta corriente con sólo un pasaporte. Aquí hacemos una canasta de obstáculos, en si son pequeños, pero en conjunto, son bastantes. Tenemos que dar facilidades, producir en Arica es muy difícil, para producir se necesita materia prima abundante y barata, y no las hay, o grandes mercados consumidores y cercanos, cuáles tenemos, ninguno. O le buscamos por ese lado (integrar economías), o nunca vamos a desarrollar una actividad manufacturera.

-Así como usted defiende la apertura de la frontera, otros personas y sectores se la juegan por mayores incentivos y beneficios especiales para Arica...

-Hoy día decir, mire aquí tiene arancel cero, no es nada, porque hay tanto tratado de libre comercio, hay tanto producto que entra con arancel cero. Qué diferencia te hace estar a dos mil kilómetros, perdiste todas las ventajas. Tenía un amigo, Bertonatti hacía ambulancias, se instaló en Iquique porque no pagaba aranceles, llegaron los tratados de libre comercio de los chasis extranjeros a Santiago, y cerró la industria en Iquique.

PESOS, SOLES Y DOLARES

-¿Y el cambio a favor para comprar en Perú?

-Los peruanos y los chilenos compramos en dólares, por lo que eso no vale.

-Pero pensando en la simple economía familiar

-Si tu vas a comprar un televisor Sony vale los mismos dólares que para Tacna, Iquique o Arica, lo que pasa es que allá no tienen impuestos o es inferior al chileno. La gente se guía mucho por el precio de los licores, porque haya no hay impuesto de los licores, eso genera una sensación de que todo es barato.

MANO DE OBRA

Abusleme comenta que "un fabricante de sillas peruano, me comentó que lo único a que les obliga la ley es a dar 15 días de vacaciones, y el sueldo mínimo es algo así como 150 dólares, y punto nada más".

-¿Y aquí las leyes laborales complican mucho a su gremio?

-Claro, evidentemente, la mano de obra en Chile es muy cara, y no es de una gran especialización. Compra un producto base, una camisa si la hago en Vietnam vale 30 dólares al mes, si la hago en China, vale 60.

Tú importas la camisa y estás importando mano de obra. Puedo traer las telas para Chile para fabricar, pero acá la mano de obra es muy cara, y no tengo posibilidad de competir.

-¿Cuáles son sus aspiraciones como Cámara?

-Queremos integrar a todos los sectores productivos de Arica, integrar a las universidades, y queremos que entre todos nos ayudemos a pensar las vías de salidas para la situación en la estamos. Aproximadamente tenemos hoy 170 asociados y me gustaría terminar el periodo con unos 200.

-Además de la apertura de la frontera, ustedes postulan una Zona Franca de Extensión

-Hay que retomar una idea de zona franca de extensión, esto va a funcionar para los productos de Perú y Bolivia, si un pequeño comerciante local quiere traer 10 docenas de camisetas de algodón de Perú, que no las tenga que mandar a Iquique, entonces, no podemos encarecerle lo costo.

Nosotros competimos con desventajas, costos operacionales más alto, costos de personal más alto, todo más caro, entonces hay que tratar de quitarle la grasa, a lo que no le agrega eficiencia al producto, para que mandar el producto a pasear a Iquique le resta eficiencia al producto, y esas ineficiencias, ya no las resiste el mercado.

PSU, peligro a la vista

El tema de la educación nuevamente esta semana saltó al tapete al conocerse los resultados de la PSU, de lo cual me voy a permitir opinar sólo aplicando mi sentido común (el menos común de los sentidos).

No produjo mayor sorpresa que los colegios particulares pagados y subvencionados mejoraran sus promedios, y los municipalizados los disminuyeran. El factor socioeconómico de los alumnos juega un importante rol, pero no es menos cierto que más importante es el hecho que los primeros tienen incentivos para mejorar, mientras que los segundos pueden empeorar y no pasa nada. Tanto es así, que en los mejores cien colegios del país, sólo figuran dos municipales (Instituto Nacional y Carmela Carvajal), lo que es una prueba irrefutable que sin incentivos no hay mejoría en ningún campo. La educación no es una excepción.

Uno de los argumentos que se dieron para cambiar la PAA por la PSU, fue que esta prueba corregiría las distorsiones producidas por factores socio-económicos, lo que evidentemente no se produjo. Por supuesto, los responsables guardan discreto silencio.

Una consecuencia poco debatida que deberemos afrontar a futuro es que la desigual calidad de la educación marginará a sus víctimas del desarrollo económico, cultural y social del país, lo cual creará inestabilidad social y política, con consecuencias fáciles de imaginar si recordamos los recientes disturbios de París, mostrados en los noticieros de televisión.

No existe factor que ayude más a la movilidad social que la educación. Si ésta no cumple ese principal rol, estamos perpetuando el círculo vicioso de la pobreza, y los alumnos pobres no tendrán otro anhelo que ser un poco menos pobres que sus padres.

La sociedad de la igualdad de oportunidades parte con el derecho a la vida del ser concebido, continúa con una alimentación adecuada de la madre, y posteriormente del lactante, lo cual requiere fundamentalmente recursos. Pero, lo que continúa es una educación adecuada, y para eso no bastan los recursos, sino que es necesario un gran compromiso social, un gran esfuerzo de todos los sectores, un abandono de las ideologías contumaces, y tener como único norte un gran amor a Chile y a nuestros descendientes.

¿Tendrá la multicomisión formada tras las protestas de los pingüinos la capacidad para esta tarea? Espero equivocarme, pero no lo creo.